martes, 22 de septiembre de 2009

Primavero

El año pasado a esta hora
estaba en la cama de la clínica.
Con algunos cañitos
saliendo y entrando
a mi cuerpo,
contenta y
en shock,
todo a la vez!
No sentía ningún dolor.
Eso siempre
me pareció super raro.
Ya no.
La vida se la rebusca
para seguir viva.
Y de acuerdo a las
evidencias,
ahí no me bajaba,
por ahora sigo viaje.
En este año hubo de todo,
emociones varias,
varios cambios
y
el pelo me sigue creciendo,
como a todo buen vampiro,
que se precie de serlo.
Veremos
que me
deparará el destino.
Hoy levanto mi copa
y brindo por
Primavero!